martes, diciembre 12, 2006







Cuando una persona es capaz de reunir a viejos amigos que prefieren olvidar el por qué se distanciaron para estar en su compañía... Cuando una persona es capaz de hacer reir a los demás o conmoverlos hasta las lágrimas... Cuando una persona orilla a otras a la reflexión, no me gusta que se separe de mí...



Y aunque sé que la vida es una carretera, que compartimos este tramo y que hoy tomamos rutas distintas, no puedo evitar sentir un vacío en el estómago y sentirme un poquito abandonada. Pensé que podría quedarme más tiempo en esa isla...


Ya nos llegó la hora del hasta luego por tiempo indefinido:



Te voy a extrañar un chingo.



¡Buena suerte!






lunes, diciembre 04, 2006

Cómo lidiar con la burocracia y no morir en el intento...
Por cuestiones ajenas a mi entendimiento, que por cierto es limitado, mi madre decidió "ayudar" a un conocido suyo, comprando la "póliza" de seguros de gastos médicos menores de Médica VRIM...
Los consultorios, ubicados en el World Trade Center, están "decorados" con al intención de provocar en el cliente alguna especie de confianza o tranquilidad, sin embargo al llegar por primera vez hace 4 años me hicieron sentir el látigo del Seguro Social -o lo más cercano a ello en mi reitero, criterio pequeño burgués-.
Sobra decir que ni siquiera huelen bien y que da la impresión de que carecen siquiera de empleados de intendencia. Ni hablar, me dije en aquella ocasión, no te dejes guiar por el instinto, los médicos tienen cédula y consultorios, vienen aquí como parte de una "labor social" o un alto compromiso con la salud del mexicano clase mediero, ja!
Hace más o menos dos meses, fui por cuarta ocasión a una revisión ginecológica, y debido a que había olvidado mi credencial, hube de desembolsar la copiosa cantidad de un mil pesitos, mismos de los cuales se comprometieron a reembolsar la mitad a condición de llevar mi credencial vigente...
Siendo así las cosas, pagué de conformidad y me fue entregado un recibo por quinientos morlacos. Pasaron cuatro semanas cuando por fin pude volver a ese tugurio que Hipócrates jamás hubiera frecuentado, y me apersoné en el piso 12, en las "oficinas corporativas" en dónde fui recibida por un personaje salido de la imaginación de Jorge Ortíz de Pinedo.
Una mujer "rubia" -y por rubia en la Ciudad de México debe sobreentenderse que las cortinas no combinan con la alfombra- echa una ojeada al recibo, sin voltear la mirada y casi lanzándome el recibo me dice:
-"Tenías cinco días para tramitar el reembolso"
Híjole mano, y que me encabrono.
-"Pero... ¿dónde dice que tenía cinco días?
- Te lo tuvieron que haber dicho allá arriba (refiriéndose al local de consultorios en el décimo séptimo piso).
- No pues... no me lo dijeron.
- Pues tenías cinco días.
- Señorita, entienda que no veo por qué se niega a hacerme mi reembolso, si en ninguna parte de este recibo viene impreso que cuente yo con cinco días para tramitar el reembolso, o a lo mejor si me lo señala en el documento, me callo y me voy, tal vez no lo he leído con detenimiento.
- Es que tienes cinco días, y ya.
- Sí, por eso, pero dígame dónde lo dice.
- Tienes cinco días.
- ¡VERGA! Si no soy sorda, ni tampoco estoy pendeja, y me lo podrás repetir un millón de veces, pero no por eso tiene lógica... ¿Entiendes que no hace ningún sentido en mi cabeza, por más que me lo repitas? (Obviamente a estas alturas yo no hablaba "fuerte" sino que gritaba a todo pulmón)"
MUTIS
La mujer, a quién el tono le subía y le bajaba del rostro, golpeaba con sus desproporcionadas y vulgares uñas de acrílico una carpeta sobre su escritorio
- "¿Entonces qué hago? le pregunté
- Pues si quieres sube y pídele a la chava que te atendió que ella te dé tu dinero.
- O.k. pero ¿no me van a traer como pendeja de un piso a otro? Te estoy hablando, y en español, si subo al piso diecisiete y me dicen que tengo que volver a bajar, voy a venir nada más a darte una cachetada, ¿me explico?
MUTIS, golpeteo de uñas de acrílico, colores en la cara, mutis, continúo:
- Por que tengo que bajar a la recepción, cambiar mi credencial, usar otros elevadores y no lo voy a hacer dos veces más que para venir a cachetearte, ¿me estás entiendo o ya se te olvidó el español?"
La cabrona no me contestó, por lo que recogí el recibo de la mesa, y salí enfurecida a peregrinar. Cuando llegué a mi segundo destino, me presenté más calmada por la caminata y con el único objetivo de conseguir a toda costa mi dinero; así que con una sonrisa y amabilidad fingidas le extiendo mi recibo a una de las tres empleadas que estaban detrás del mostrador:
- "Deseo tramitar un reembolso.
- Este no es el piso.
- Estoy consciente de eso -perdiendo la paciencia pero no el objetivo- pero en el piso doce me comenta su compañera que no me pueden devolver mi dinero, por que según ella contaba con cinco días para hacerlo. Me dijo que viniera con Ustedes: ¿Me devuelven mi dinero por favor?
- ¡Ah! Sí, ya me acordé de tí, veniste hace como un mes, ¿no? Y no traías tu credencial... pero te dijimos que tenías cinco días. No te puedo regresar tu dinero.
Habiendo perdido nuevamente el control rebatí:
- Pues yo no pienso irme de aquí hasta que no me devuelvan mi dinero, me vale verga si tengo que acampar, váyanse haciendo a la idea, porque no veo que en ninguna parte el recibo tenga impresa esa condición. Además tampoco creo que hayan hecho su chamba, porque nadie me habló al quinto día para recordarme que me iban a chingar quinientos pesos, y encima de todo yo no entiendo por qué mierdas cuidan ese dinero ¡como si fuera de Ustedes! ¿o qué? ¿te los vas a quedar tú?
- Déjame checar con la contadora, dame tu credencial.
- Vaya, parece que ya nos vamos entendiendo."
Tomo asiento, y en menos de dos minutos sale la recepcionista/ enfermera/ archivista/ telefonista/ tarotista:
- "La contadora, en un tono algo subido y muy solemne, ya autorizó (esto sí con un tono grandilocuente y casi solemne) tu reembolso... pero necesito una copia de tu credencial.
- Por mí quédatela, no la pienso volver a usar.
- No me la puedo quedar, es tuya y además todavía no vence.
- Sí, por eso, ya no la pienso volver a usar, si quieres engrápala al recibo y háganle lo que quieran.
Sinceramente no sé no siquiera por qué he venido cuatro veces, ni siquiera me consta que sus médicos estén titulados y la verdad este congal me da más la impresión de una falsa empresa para lavar dinero que un consultorio médico.
- Es que no me la puedo quedar, ainterpeló algo incómoda.
- Bueno, pues sácale la copia pues.
- No tenemos copiadora, tienes que bajar al Lobby y sacarle la copia.
- ¡Verga! ¿No mamen, no tienen copiadora? ¡Dame papel carbón y te la calco, mujer! Yo no voy a bajar...
- Tampoco tenemos papel carbón... me contestó, notablemente avergonzada.
- Mmmmmta, a ver si entiendo bien: ¿quieres que yo, baje al Lobby, busque el centro de copiado, saque una copia de mi credencial, que no me quiero quedar, y vuelva a subir con la copia en la mano? ¿No quieres ya que ando por allá, que te suba una coca, unos chocolates, o una revista? ¿Todo está bien patrona?"
Extiende la credencial, dirigiéndose a otra de las gatas narizonas que estaban ahí sentadotas:
-"Esther, acompáñala a que saque la copia.
- ¡Órale!, dije sorprendida, no tienes copiadora pero si "coordinas" gente acá, eres bieeeeen importante."
Salgo escoltada por Esther, mujer madura de complexión por demás robusta quién además de "acompañarme a por la copia" cual bouncer de Pericoapa, tenía secuestrados a dos millones de vellos entre su piel y una media color ala de mosca (los bigotes si estaban en libertad, lo mismo que los vellos entre ambas cejas y las patillas de caudillo de la revolución mexicana), y una vez dentro del elevador me atreví a dirigirle la palabra a mi custodia:
- "Me imagino que también tengo que pagar la copia.
- No, contesta Esther en tono de perdona vidas, esa la pagamos nosotros.
- No, pues muchas gracias por ahorrarme un peso, qué generosos."

martes, noviembre 21, 2006

Ojalá pudiera estar siempre así, siempre de buenas, siempre ante tus ojos... Ojalá pudiera no caer de tan alto cuando se caen los efectos embriagantes de la atracción... Roña.

miércoles, noviembre 15, 2006

"Todo es posible en todo momento" es la máxima de la Banda de la Muerte: le abrimos la puerta al absurdo de par en par a efecto de, por lo menos yo, reir a carcajadas aderezadas de asombro.
¿Qué será de un grupo de fulanos y fulanas que ven su paso por el mundo como un turisteo? Los prejuicios apuntarían a que somos una punta de vagos sin oficio ni beneficio alguno, sin rumbo jajaja, cuando en realidad the ride for itself is what's truly worthy... ¡pero no! ¡NO amable lector (a)!, no lo somos. Estudiantes, profesionistas, empleados, todos aparentemente "normales" hasta que nos encontramos...
Iba a seguir escribiendo, pero caí en la cuenta de dos cosas: primero, que las anécdotas de la Banda de la Muerte son difíciles de digerir, y segundo creo que analizar a la Banda de la Muerte puede dar origen a su destrucción, me niego a hacerlo y seguiré viviéndola con el mismo cariño con el que se llega a casa después de una larga ausencia.
Al tenerla en mis manos quise llorar.
Cubierta áspera que se tornará en una dura coraza, era en ese momento suavidad total.
¿En qué te identificas con ella? En que soy nueva... en que hemos tenido que luchar por acreditar el derecho a estar aquí, tengo mi lugar en el mundo y soy parte del todo. La miro y revolotea en mi mano, ciega y confiada... ¡Suave caparazón déjame sentirte!
Acerco mi cara, la miro de frente y la toco con mi nariz, con los ojos cerrados y lacrimosos: bienvenida, mucha suerte.
¿En qué te pareces a ella? En que no puedo ver, voy a tientas con el resto de mis sentidos bien alerta. En que sólo el instinto me guía y confío en él, hago caso omiso del resto. Sé que es hacia allá a dónde tengo que ir, lo traigo programado...
A duras penas puedo creer mi buena estrella: soy yo quién te detiene, te sostiene y te honra desde un postura de humildad.
¿En qué te pareces a ella? Suave, frágil, expuesta. Nací con ese caparazón flexible y pienso: si a ella le toma alrededor de 15 años endurecerlo por completo, por qué he yo de permitir que el mío se endurezca sin sentido... Ella lo necesita así, firme por lo blando del interior y en eso me parezco a ella, caramelo de cianuro, delicioso helado con cubierta de piedras, y ¿no somos todos así?
Resurrexión, eso es. Todos los días me regalan la oportunidad de reinventarme, de redescubrirme, de morir y renacer. Todos los días soy esa pequeña tortuga y ciertamente hay algo más grande que me contiene amorosamente, que me recibe en su mano abierta y me besa la nariz: eres parte del todo, bienvenida y suerte.

lunes, noviembre 13, 2006

jueves, noviembre 09, 2006


De enamoramienos fugaces y otras cosas...

De eso vivo, y en ellos y por ellos pierdo también la vida o por lo menos me siento morir.

Y renazco, pues...

no hay sensación que se compare a ese batiente, creciente, floreciente aleteo estomocal... la estúpida emoción justificada únicamente en mi cabeza con quimeras que mi corazón alimenta...

Fantasías, aleatoriedades, ensoñaciones en estado de vigilia que me reiteran mi pertenencia a un mundo ajeno al que se cruza ante mis ojos, y sonrío

Y despierto cuando te veo, para olfatearte y si me lo permites... acariciarte...

Para sonreirte con cara de idiota, y escuchar hasta la última de las palabras que salen de tu boca, electrizantes solo para derrumbar los castillos de naipes que sobre una nube te había edificado.

Es como morir: sólo tantito, nomás tantito... poquito nomás

como fracturarle un ala a un colibrí, así, suavecito jajaja, suavecito como tu panza, tiebicita como la mía, madres que enculamiento tan infantil y tan bonito y tan culero.

Lo mejor de todo es que sé que es pasajero, que es psicosomático y que me lo brindo por que de lo contrario me volvería cuerda, ja!

Me provocas euforía, deseo, sueños, anhelos... me provocas vivir... ejem cof cof corrijo:

cuando me pongo a pensar en tí eso es lo que siento aunque no sea recíproco y no es recíproco porque sólo existe en mi... ¿qué oportunidades habría de que se materializara?
Probablemente todas, si realmente se desea. Sin embargo al mismo tiempo devendría tangible: podría efectivamente tocarte, olfatearte

entonces me daría cuenta de lo rasposos que son tus codos y lo mal que huelen tus pedos...

Te prefiero aquí, siempre aquí... en mí

haciendo zurcos: corazón- cabeza- corazón- cabeza- corazón- corazón- corazón- cabeza

yendo y viniendo, llevando y trayendo momentos que jamás serán pero que recordaré vívidamente (con colores y prendas y lugares, y aromas y sabores que no llegaran)

¡Qué bien me sabes en ese trayecto!

Dura un poco más, poco más que los demás
por favor
por el bien de mi cabeza, dura un poquito más

ayúdame a dilatar sólo tantito, poquito nomás la decepción que con olas gigantescas devasta mi corazón y le pone una revolcada que le hace creer que está muerto...

...muerto un ratito nomás, sólo tantito nomás...

Muerto hasta que la cabeza le vuelve a tender la mano y lo vuelve a enamorar.

miércoles, noviembre 08, 2006





A french and two half french half mexicans walk into a bar... did I mention this happens on a tuesday night?

miércoles, octubre 25, 2006

Anoche soñé que estando sentada en mi habitación, me hacía acompañar de nada menos que Andrés Bustamante, quien visiblemente más viejo que aquel que me viene a la mente cuando escucho su nombre, observaba conmigo a través de mi ventana. Desfilaban ante nosotros distintas vistas de la Tierra desde el espacio, así como fases lunares... luego entonces mi cuarto era una especie de nave espacial. Yo estaba maravillada con la oportunidad de ver algo que jamás pensé que me fuera posible admirar: la Tierra desde el espacio exterior, así que trataba de adivinar a toda costa alguna forma continental o marítima que me permitiera saber qué parte del mundo se presentaba ante mí. Pasaban rápido... Fue entonces cuando le dije al "hombre maduro":
-"¿Cómo esperan los hombres de hoy que uno se enamore de ellos si no saben nada? La gente de tu edad, sin agraviar, hacen cálculos complicadísimos de memoria, saben matemáticas por que pueden sacar una raíz cuadrada con fórmulas, no porque sepan utilizar una calculadora. Y mejor aún, saben por qué y para qué sacan una raíz cuadrada..."
Él me mira y me pide que observe algo por la ventana... me concentro y trato de adivinar qué es lo que quiere que vea... Observo la Luna y no veo más que cráteres... embelesada como estaba, interrumpe mi análisis, y es entonces cuándo voltea a verme:
-"No, aquí, abajo..."
Me percato entonces de que hay dos líneas de tendedero suspendidas en el aire, casi en mis narices, en la línea más cercana a nosotros, hay pantalones y camisetas azules y rosas, y al final del tendido un suéter negro de cuello alto. Lejos del resto.
-"Es ropa de manicomio." Afirma.
-"No mames", contesto,"son uniformes de hospital..."
Efectivamente, eran esas "sobre prendas" que usan los residentes de los hospitales...

viernes, octubre 13, 2006

Friday night I crashed your party
Saturday I said I'm sorry
Sunday came and trashed me out again
I was only having fun
Wasn't hurting anyone
And we all enjoyed the weekend for a change
I've been stranded in the combat zone
I walked through Bedford Stuy alone
Even rode my motorcycle in the rain
And you told me not to drive
But I made it home alive
So you said that only proves that I'm insane
You may be rightI may be crazy
But it just might be a lunatic you're looking for
Turn out the light
Don't try to save me
You may be wrong for all I know
But you may be right
Remember how I found you there
Alone in your electric chair
I told you dirty jokes until you smiled
You were lonely for a man
I said take me as I am
'Cause you might enjoy some madness for awhile
Now think of all the years you tried to
Find someone to satisfy you
I might be as crazy as you say
If I'm crazy then it's true
That it's all because of you
And you wouldn't want me any other way
You may be right
I may be crazy
But it just may be a lunatic you're looking for
It's too late to fight
It's too late to change me
You may be wrong for all I know
But you may be right
You may be right
I may be crazy
But it just might be a lunatic you're looking for
Turn out the light
Don't try to save me
You may be wrong for all I know
But you may be right
You may be wrong but you may be right
You may be wrong but you may be right

miércoles, octubre 11, 2006